Diversidad funcional

Hoy asistí a unas Jornadas sobre discapacidad.

Entre todas las exposiciones y disertaciones rescaté una idea que me conmovió: Hablar de discapacidad, incapacidad o minusvalía no es solo injusto sino incorrecto. Lo adecuado sería decir diversidad funcional, que aunque suene a eufemismo, es más adecuada. Porque todos toditos, en algún momento de la vida, o en alguna circunstancia, somos discapacitados. Algo nos dejará paralizados, inmóviles, ciegos, tullidos. Con una tremenda incapacidad intelectual o física para hacer frente al mundo. Apenas nos podremos guiar con un bastón o un perro lazarillo. Necesitaremos ayuda, acompañamiento, frente a una situación o un momento que nos supere. Porque en ese momento el entorno no se ajustará a nuestra incapacidad: Nadie habrá pensado en hacer una rampa para acceder a nuestro corazón o al piso superior. Muchos no querrán estar cerca nuestro.

Y pude reconciliarme mejor con algunas partes de mi. De los demás.

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http://es.wikipedia.org/wiki/Diversidad_funcional